El Consejo
Regulador Indicación Geográfica Protegida “Cítricos Valencianos” ha
valorado como “decepcionante” la primera parte de la campaña citrícola
de la Comunidad Valenciana. Asimismo, ha destacado que tanto el veto
ruso, la competencia desleal de terceros países, y sobre todo la presión
de la gran distribución, han sido fuertes hándicaps para el sector citrícola valenciano durante este periodo.
Según
explica el Director Gerente de IGP “Cítricos Valencianos”, José Enrique
Sanz, “la evolución comercial del inicio de la campaña 2015/2016 no ha
sido la esperada, debido a que con una merma de producción en campo
considerable, no se ha tenido la respuesta positiva por parte de la
demanda. En momentos puntuales, sí se han dado buenas cotizaciones pero
el mercado no ha tenido continuidad”.
En opinión del portavoz de esta entidad, “el año 2015 que ahora dejamos atrás, no ha dejado un buen sabor de boca para los
profesionales de la citricultura valenciana en líneas generales,
especialmente por la fuerte competencia de otros países como Egipto,
Marruecos o Turquía, que entran en el mercado europeo con escasos
controles fitosanitarios y que tienen unos costes de producción ínfimos,
por lo que están cometiendo claramente ´´dumping social``.
Además,
el titular de IGP ha apuntado también que “la primera parte de la
campaña de naranja y mandarina se ha caracterizado por una óptima
demanda comercial en los mercados internacionales, aunque es verdad que
durante finales de noviembre y diciembre se ha producido una enorme
irregularidad en el capítulo de precios y en el número de operaciones
comerciales. En el caso del limón, este
año los precios han sido buenos para los productores y la demanda es
ágil y fluida para este producto en los mercados exteriores”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario